Ideación para el desafío de diseñar a diario

Ideación para el desafío de diseñar a diario

Mejora tus soluciones de diseño de UI considerando muchas ideas antes de decidirte por cualquiera de ellos. Una metodología sólida en la ideación (en la RAE: génesis y proceso en la formación de las ideas) amplía tu capacidad de generación de ideas.

Cuando te piden rediseñar una página web o un elemento, no es posible agitar una varita mágica y obtener por arte de magia un nuevo diseño, brillante, materializado delante tuya; ni tampoco meter la mano en tu bolso de patrones de diseño estándar y aplicarlos a ciegas. Aun cuando seguir los estándares es importante y facilita el aprendizaje del diseño de interfaces, los patrones no siempre ofrecen una respuesta para tus proyectos únicos de interfaz de usuario. En lugar de esperar a la “inspiración", los diseñadores UX necesitan una manera sistemática de abordar las actividades diarias de diseño que produzcan diseños de alta calidad y que resuelvan los problemas de usabilidad.

Definición: Ideación es el proceso de generación de un amplio conjunto de ideas sobre un tema determinado, sin ningún intento de juzgar o evaluarlas.

Mientras que el objetivo final de la ideación es un diseño de alta calidad que resuelva un problema específico, el foco de la ideación es la cantidad en vez de la calidad. La ideación es sólo un paso en el proceso de diseño UX completo; una vez que se generan las ideas, el análisis separado tiene que continuar para decidir qué ideas (o partes de las ideas) hay que seguir. Cuantas más ideas, mejor: un espectro amplio donde elegir aumenta la probabilidad de que una de las ideas será la semilla para una gran solución de diseño.

La mayoría de la gente asocia la ideación con el término "brainstorm". Técnicamente, la lluvia de ideas es un tipo de ideación, que Alex Osborn formalizó como un proceso en su libro La imaginación aplicada. Las directrices de Osborn para el brainstorming - basadas en la cantidad, en que no hay ideas malas, que la locura es bienvenida, y en el fomento de la construcción de las ideas - también funcionan bien para muchas otras técnicas de ideación.

Fundamentos de la ideación

El proceso de ideación toma forma de varias maneras: se puede hacer solo o en grupo, en persona o de forma remota, la sesión puede ser corta o abarcar varias horas, se puede hacer en un único evento o formalizarlo como una reunión periódica, y puede ser formal o informal, según sea necesario. No hay límites a los tipos de problemas o retos de diseño que se pueden beneficiar de la ideación, tales como la adición de una nueva característica de producto, o el rediseño de una parte específica de una sola página.

Hay tres características principales de cada sesión de ideación:

  1. Las ideas no se evalúan. La característica fundamental de una sesión de ideación es que todo juicio se pospone para que cada participante se sienta cómodo, sin temor a ser evaluado. La evaluación ahoga la creatividad.
  2. Las ideas se graban y la sesión queda documentada. La grabación puede ser tan sencilla como tomar notas con papel y un lápiz, o incluir materiales tales como pizarras, marcadores, notas adhesivas, pegamento, cartón, tijeras, revistas viejas, u otros documentos para cortar - cualquier cosa que ayude a capturar la idea antes de que se disipe. Estos elementos registran todos los pensamientos de una forma tangible dentro de la sesión y aseguran que ninguno será olvidado ni desestimado una vez que llega la hora de pasar a la etapa de evaluación. Además, tener estos elementos visibles a los que referirse durante la sesión de ideación puede servir de inspiración para más ideas.
  3. La colaboración estimula ideas diversas. Mientras que un individuo puede sin duda idear su propio éxito, trabajar en grupo a menudo genera un mayor número y variedad de ideas. Esto podría significar invitar a una sola persona o bien a un equipo multidisciplinar entero a participar en la sesión de ideación. Mientras que un grupo grande corre el riesgo de resultar difícil de manejar, un conjunto más diverso de antecedentes, experiencias, y áreas de experiencia puede producir un conjunto más amplio de ideas. Permitir que otros compartan sus ideas en este entorno abierto también tiene el beneficio de formación de equipos  y puede fortalecer el diseño final, porque todo el mundo tiene la oportunidad de contribuir.

Cuando idear

Antes de embarcarte en tu viaje de ideación para fijar u optimizar un diseño, recuerda siempre asegurarte de que se está resolviendo el problema concreto. Es fundamental que todos los participantes en la sesión de ideación entiendan las necesidades de los usuarios y que fijen las ideas en estas necesidades, y no en nuevas tendencias de diseño o soluciones técnicas.

La línea de tiempo o el presupuesto no debe ser una excusa para saltarse la investigación del usuario. Incluso en los pequeños proyectos de rediseño, siempre hay tiempo para ejecutar una rápida prueba de usabilidad a distancia sin moderador sobre el diseño existente para obtener información. Si no entiendes a tus usuarios, las ideas que generes no tendrá ningún valor: puede que no sean el objetivo, y, lo que es peor, no tendrás los criterios de evaluación correctos para determinar cual es la mejor idea.

Usa los resultados de la investigación para definir el problema de ideación que quieres resolver. Sé claro acerca de las dificultades que encuentran los usuarios. Por ejemplo, podrías decir: "De acuerdo con nuestro estudio diario, los hablantes no nativos de inglés tienen dificultades para utilizar la interfaz de voz para informar de problemas mecánicos." El nivel de detalle, necesario para este planteamiento del problema, variará. Por ejemplo, un ámbito  de aplicación reducido puede frenar la creatividad, mientras que un ámbito demasiado amplio puede generar ideas fuera del foco. En cualquier caso, asegúrate de que el foco en la sesión de ideación está en mejorar la experiencia del usuario; dejar de lado las restricciones del mundo real como la viabilidad técnica o la viabilidad del negocio. Recuerda, en esta etapa ninguna idea es demasiado rebuscada: Es mucho más fácil reducir una idea loca que se ocupa de una verdadera necesidad del usuario, que tratar de hacer una idea mundana deseable.

La ideación debe ocurrir antes de que las soluciones se hayan prescrito para el problema de diseño, y antes de la creación de cualquier prototipo UX. Algunas de las sesiones de ideación, pueden incluir la realización de bocetos de la interfaz como una forma de generar y documentar un gran número de diversos diseños, pero éstos deben ser vistos simplemente como elementos de la sesión, y no como prototipos finales que sean implementados sin una evaluación posterior.

La ideación promueve el diseño en paralelo

Pasar tiempo ideando varias soluciones posibles antes de comenzar a diseñar es visto por algunos como una pérdida de tiempo, especialmente cuando se enfrentan a plazos cortos y presupuestos limitados. De acuerdo con estas personas negativas, ¿por qué entretenerse con la creación de una multitud de diseños, cuando casi todos ellos serán finalmente rechazados en favor de un solo diseño? ¡No caigas en esta trampa! Los beneficios del diseño paralelo han sido documentados y cuantificados: no debemos limitarnos a una solución de diseño único y dejar la mayor parte del espacio de diseño sin explorar.

La ideación y la investigación de soluciones múltiples (en contraposición a una sola) nos ofrecen una mejor oportunidad para descubrir la ruta de diseño óptimo, en lugar de simplemente el primer paso. Generando muchas ideas destacas diferentes facetas del problema y también diferentes enfoques potenciales para la solución; los pros y los contras de cada propuesta pueden ser posteriormente evaluados, y las ideas se pueden combinar para crear la solución ideal. Recuerda:

  • La probabilidad de acertar la región óptima del espacio de diseño con una sola idea es baja.
  • La probabilidad de tener una idea de entre muchas  que se acerque al ideal es alta.

El tiempo dedicado a idear es un tiempo bien empleado.

Evaluar los resultados de una sesión de ideación

Una vez que se ha generado un amplio conjunto de ideas, es el momento para relajarse y tomar un descanso. Alejarse (al menos mentalmente) de las soluciones propuestas es un paso necesario antes de que ocurra cualquier evaluación exitosa. Tanto si lo has ideado por tu cuenta o con un grupo más grande, haz un tentempié, toma un café, da un paseo, discute algunos temas no relacionados durante algunos minutos - todo para romper la sesión de ideación antes de pasar a la siguiente fase. Al dar a la mente la oportunidad de descansar, tu y tu equipo vais a evitar tomar decisiones impulsadas por la fatiga y podrás acercarte mejor a la evaluación y priorización de las ideas.

Esta evaluación del grupo al final de la sesión de ideación es fundamental para demostrar que todas las ideas presentadas son igualmente escuchadas y consideradas, y mostrar cómo la participación de cada persona tendrá un impacto en el resultado final. Si los participantes en la sesión de ideación no se sienten escuchados y valorados, es poco probable que alguna vez vuelvan a participar de nuevo.

Discutir las ideas documentadas con el grupo de ideación - o si estás solo, contemplando cada una de las ideas producidas - y decidir cual de ellas es la que nos lleva hacia adelante puede ocurrir de muchas maneras. Los métodos van desde el uso de diagramas de afinidad para agrupar las ideas, de modo que cada diseño propuesto es criticado por el grupo (¡no te olvides de señalar los aspectos positivos!), hasta dar un "voto" a las diferentes sugerencias. Este proceso te ayudará a entender los diversos objetivos y beneficios de cada idea cuando llegue el momento de pasar a la fase de prototipo. Ten en cuenta que no es necesario elegir un diseño único para probar y descubrir cuál es el mejor concepto.

Conclusión

Ya sea formal o informal, de forma individual o en equipo, cada tenemos que diseñar algo que pasamos a través de un proceso de ideación. La ideación no se utiliza sólo para la generación de la próxima "gran idea”, más bien todos los diseñadores UX participan en la ideación al hacer frente a cualquier problema de diseño, grande o pequeño.

Al evitar cualquier evaluación temprana de las ideas, abrimos nuestra mente a la exploración más profunda y, en última instancia, a una mayor innovación y conocimiento. Es muy poco probable que la primera idea que nos encontremos sea la mejor, por lo que es importante darnos el espacio y el tiempo para seguir soñando con más ideas. 

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